Tengo un futuro vendedor de 4 años
Cuando le pregunto que quiere ser de mayor tiene claro que quiere ser mecánico 🔧 o constructor de coches 🏭 o directamente me dice que quiere ser un coche (cuanto daño han hecho los Transformers en la mente juvenil).
Lo que no sabe aún es que, para casi todo en la vida, y con más motivo, cuanto más avancemos en el mundo interconectado, automatizado e impersonal, el mejor vendedor, el que sepa detectar necesidades y acompañar a sus clientes, podrá ser mejor mecánico, panadero, emprendedor o “Chif Happy Biznes Development Rep of the world”.
Nadie es vendedor por vocación.
Aunque los niños son posiblemente los mejores negociadores del mundo.
Si eres padre/madre, sabrás de lo que hablo.
Casi todas las personas que terminamos dedicándonos a la venta lo hemos tenido que hacer impulsados por la situación.
Porque emprendes 👩🏻💼.
Porque hablas bien 🗣️.
Porque sabes contar historias 🫂.
Porque alguien tenía que hacerlo….
Pero una vez que conoces las reglas de la venta, la psicología que se esconde detrás de la compra, las maneras de resolver los dolores de tus clientes y los procesos que te permiten medir, analizar y mejorar tus acciones, y es en ese momento cuando empiezas a amar las ventas.
A entender que la venta tiene más de ciencia que de intuición.
A entender como la tecnología te ayuda muchísimo a no tener mil cosas en la cabeza y trabajar más tranquilo, con pautas muy claras, que funcionan.
Los vendedores no tenemos que pensar demasiado, tenemos que ejecutar, y eso lo hacemos cuando tenemos un sistema que nos permite ir muy rápido.
Lo difícil es tener ese sistema.
Pero una vez lo tienes, tu mente hace “clic”, te relajas, te llenas de confianza y consigues el doble…el triple…10 veces más, con la mitad de esfuerzo.
Si no has encontrado aún ese “clic” y quieres saber cómo alcanzar ese momento con un SISTEMA que funciona, reserva una sesión con nosotros.
Buscaremos juntos tu propio “clic”.